Nosotros consideramos que la Facultad debe fortalecer la biblioteca como espacio de acceso al conocimiento, a la bibliografía necesaria para los cursos y al rico repositorio de fuentes que conserva.
Si bien bastante bibliografía ha sido digitalizada, mucho se ha hecho “artesanalmente”, dando como resultado archivos de mala calidad, a veces imposibles o muy difíciles de leer. Entre esto y el precio de la impresión, muchas estudiantes seguimos prefiriendo buscar nuestra bibliografía en la Biblioteca de Facultad. Asimismo, dado que nos formamos en investigación, es natural que en los cursos avanzados debamos emprender la búsqueda de la bibliografía que necesitamos, sin conformarnos con los libros o capítulos asignados para controles de lectura.
En suma, la Biblioteca es un lugar de mucha importancia para estudiantes y docentes; sin embargo, es frecuente que en ella haya pocas copias de libros que muchas veces son pedidos por varias personas a la vez, o incluso que no haya ejemplares de libros relevantes para el desarrollo disciplinar; asimismo, en los casos de bibliografía extranjera, la misma no siempre está traducida, lo que muchas veces resulta un impedimento para avanzar en nuestros estudios.
Por eso sostenemos que la Facultad debe hacer pedido presupuestal para mejorarla y dotarla de instrumentos financieros que faciliten la importación de libros que no hay en el medio local.
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